La investigación en la universidad es un espacio de desarrollo social en el que el docente se desarrolla profesional y personalmente.
Cuando pensamos en investigación, lo primero que nos viene a la cabeza generalmente es una persona con una probeta en un laboratorio… Pero cuando hablamos de investigación en la universidad, nos acercamos más a un grupo de personas que tratan de dar respuestas a problemas sociales tratando de marcar una diferencia. La capacidad de este grupo de poder avanzar juntos es clave en todo el proceso. Como dice la frase atribuida a Henry Ford: “Juntarse es un comienzo. Seguir juntos es un progreso. Trabajar juntos es un éxito”.
Yo he tenido la suerte de encontrarme con grupos de personas en investigación donde la ética y la importancia que se da a las personas han sido clave en todo el proceso. La investigación a mí me ha hecho mejor docente además de ayudarme a conocerme más y a explorar mis límites. De todo lo que me ha supuesto, me gustaría destacar tres elementos:
-
Aprendizaje y profundización. Lo más obvio que se transfiere de la investigación a la docencia es todo el conocimiento que se desarrolla. Debes leer y discutir de manera que seas capaz de analizar todo al detalle. Eso permite desarrollar una base de conocimiento que revierte directamente en la calidad de la docencia